lunes, 4 de junio de 2018

Todos a Sevilla el 10-J en defensa de la sanidad pública


Artículo de Antonio Barreda


La manifestación del próximo 10 de junio en Sevilla, en defensa de la sanidad pública, convocada por la Asociación Justicia por la Sanidad ya ha dejado de ser una manifestación más de las que se hacen en Andalucía, porque está generando en la ciudadanía andaluza la conciencia de que no solo está en juego la sanidad pública en Andalucía, está en juego ahora el propio gobierno de la Junta de Andalucía de la que Susana Díaz es la presidenta.

Desde la sala de máquinas del Palacio de San Telmo han hecho todo lo posible y lo imposible para explosionar la manifestación en defensa de la sanidad pública en los medios controlados por el régimen que nos gobierna inmisericorde desde hace ya casi 40 años. Un régimen que nos ha llenado de sufrimiento y que paga con dinero público abundantes campañas publicitarias encabezadas por el slogan de la sanidad pública en Andalucía: en las mejores manos.

Los datos de los recortes sanitarios.

Pues en buenas manos tenemos aquí la sanidad pública. Sobre todo porque los datos no engañan. Andalucía es la comunidad autónoma que menos invierte en sanidad por habitante, tan solo 1.110 euros, mientras la media nacional es de 1.332 euros, según últimos datos publicados. Datos, que por cierto, ponen cifras también a los recortes de la Junta de Andalucía. En 2008 el año de la crisis, el gasto sanitario en Andalucía alcanzaba los 10.307 millones de euros mientras que en el año 2014 alcanzó tan solo los 8.737 millones de euros. Estas cifras nos indican que se recortaron o se dejaron de invertir en sanidad durante estos 6 años 1.570 millones de euros. (Recuerden que el dinero defraudado con los ERE fue de 844 millones de euros).

A lo que hay que añadir el brutal recorte perpetrado en materia de personal, con 7.500 puestos de trabajo amortizados por los responsables sanitarios de la Junta de Andalucía. El gasto ahorrado en remuneración de personal de los servicios hospitalarios y de la atención primaria, se eleva nada más y nada menos que a 808 millones de euros (algo más de 133 mil millones de pesetas). Desde 2009 a 2014 la Junta dejó de gastar 474 millones de euros gracias a prescindir de personal que prestaba servicios en hospitales. Ahorro en sueldos y contratos que se extendió a la atención primaria en la que dejó de gastar en contratos desde 2009 el a 2014 la cifra de 334 millones de euros.

Con estos datos se demuestra la enorme sangría a la que ha estado sometida la sanidad en Andalucía.

El costo de los recortes sanitarios.

Tanto el gobierno nacional como el regional de Susana Díaz han estado obsesionados los años de la crisis económica con los recortes de la sanidad, con el objetivo final claro de quien pueda pagarse la sanidad privada que se vaya de la pública. El deterioro sistemático de la sanidad pública aprovechando la crisis de 2008 ha sido una constante. Por mucha publicidad engañosa que nos cuenten en los medios afines al régimen. La propia dotación de medios materiales en la sanidad se resiente desde entonces. 

En Andalucía la fusión hospitalaria que nos vendieron desde la Junta de Andalucía no era más que una forma de ahorrar, pero no era una forma de gestionar la salud de los andaluces. Gracias a las fusiones las listas de espera se dispararon por toda la región, mientras los responsables sanitarios no eran capaces de dar solución alguna, y se repartían jugosas productividades entre ellos.

Y no se nos olvide que los mismos que nos siguen gobernando son los mismos que crearon el problema y son los mismos que nos abandonaron a nuestra suerte. Todo ello al tiempo que la sanidad privada se ofrecía para aliviar las listas de espera a cambio de hacer caja con la sanidad pública.

El sistema sanitario público está en grave peligro.

Nuestro sistema sanitario está en grave peligro. Están dándose los todos elementos para la tormenta perfecta. Los recortes y la falta de inversiones dejan muy tocada a la sanidad pública y va a provocar un quebranto a corto plazo del sistema sanitario público ya que al tener menos recursos, unido al envejecimiento de la población, el sistema dentro de unos años entrará en quiebra, y lo peor de todo esto es que se lo lleva a la quiebra de manera intencionada por la falta de liquidez y de inversiones necesarias.

El propio gobernador del Banco de España el pasado día 17 de abril en el Congreso de los Diputados ponía fecha de caducidad al sistema sanitario público español. Indicó que el impacto del envejecimiento de la población sobre el gasto público "a medio y largo plazo es un reto de primer orden", ya que si se cumplen las actuales estimaciones el desembolso en pensiones, sanidad y cuidados de larga duración aumentaría "entre 1,5 y 2 puntos porcentuales del PIB anuales en las próximas tres décadas, alcanzando un máximo superior al 21 por ciento en torno a 2050.

Para el gobernador del Banco de España los recortes y las reformas deben continuar a toda costa para el crecimiento de la economía. Habrá que decirle al gobernador que el crecimiento económico se hará a costa de que fabriquemos millones de pensionistas pobres y millones de excluidos sociales en el sistema. Todo ello unido a que muchos de los trabajadores de hoy a tiempo completo son ya pobres. Y esa es la tendencia actual, no nos engañemos.

El FMI advierte del elevado costo de la longevidad de los ancianos.

Conviene recordar que el Fondo Monetario Internacional reclama, entre otras medidas, que se recorten las prestaciones y se retrase la edad de jubilación ante “el riesgo de que la gente viva más de lo esperado”. Y también propone soluciones de mercado para mitigar ese “riesgo”. Es lo que los economistas llaman “riesgo de longevidad”. Y dan una cifra. “Si el promedio de vida aumenta tres años más de lo previsto para 2050, el coste del envejecimiento - que ya es enorme para los Gobiernos, las empresas, aseguradoras y particulares - aumentaría un 50%” en las economía avanzadas tomando como referencia el PIB de 2010.

Para el FMI se disparará el coste previsto de sostener esta longevidad de las personas en decenas de billones de dólares a escala global. Para ellos esto supone una amenaza para sostenibilidad de las finanzas públicas al disparar los niveles de endeudamiento público en una proporción similar. En paralelo, es un riesgo para la solvencia de las entidades privadas. Por lo que proponen que se aumente la edad de jubilación y recortar los beneficios sociales.

Hacia una sociedad que castiga el envejecimiento de la población.

Está claro que las principales instituciones económicas del mundo no quieren ancianos porque son un costo cada vez mayor para la economía y el crecimiento económico. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó un informe el pasado año en el que alerta a España sobre el envejecimiento de la población, que según sus cálculos puede llegar a suponer que en 2050 haya 76 pensionistas por cada 100 habitantes en edad de trabajar, estimada esta última por este organismo entre los 20 y los 64 años.

La OCDE asevera que la tasa de sustitución neta - pensión que se recibe como porcentaje del último salario percibido - o “generosidad” de las pensiones en España es demasiado alto, ya que se sitúa en el 82%, frente al 63% de la media de los países del “club industrializado”. El envejecimiento de la población, que se acelerará a un ritmo muy rápido en España, presiona sobre la sostenibilidad financiera y la adecuación de los ingresos de los sistemas de pensiones

Así, la OCDE pronostica que el envejecimiento de la población magnificará las desigualdades. Por ello, la OCDE aboga por la adopción de medidas “urgentes” que, a su modo de ver, se podrían encaminar en la dirección de facilitar el acceso al mercado de trabajo de personas que cobran una pensión y, sobre todo, facilitar la transición de los jóvenes desde el sistema educativo al mercado de trabajo.

Hacia un mundo sin ancianos.

Todo esto me recuerda al famoso libro y película La Fuga de Logan en la que para mantener estable el número de habitantes, la reproducción se realizaba por clonación, y para lograr un difícil equilibrio entre los recursos disponibles y las personas, el dictador electrónico disponía la eliminación sistemática de los mayores de 21 años. Llegada dicha edad, había que someterse a una ceremonia llamada el Carrusel, para desaparecer flotando en el aire entre las aclamaciones de los otros habitantes más jóvenes. En la ceremonia del Carrusel, existía la esperanza del Renacimiento, la creencia de que si un ciudadano ha obedecido las leyes se reencarnará en el clon que le sustituye.

Pero todo era una inmensa mentira del sistema. Por eso el joven Logan, el protagonista de la historia, impulsado por su amor a la vida, cuando llega a los 21 años decide revolverse contra esta sentencia cruel e inhumana. Acompañado de Jessica, la mujer a quien ama, Logan emprende la búsqueda del legendario Anciano que vive una existencia libre en un lugar ignorado del Mundo Antiguo.

Por todo ello, seamos todos el próximo domingo día 10 de junio en Sevilla ese joven Logan que se levanta contra todas las mentiras del sistema y que reclama su derecho a la vida, tengamos la edad que tengamos.

Nota.- Toda la información sobre la manifestación podrán encontrarla en esta página web: 







1 comentario:

  1. La sanidad publica es una basura corrupta y una estafa como todo lo publico en la dictadura sociata

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