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lunes, 13 de mayo de 2019

Cortar la garganta a Jesús Candel


Artículo de Antonio Barreda


Cortar la garganta a Jesús Candel es la orden dada por los estamentos e instituciones de la región. Todos a una. La persecución de la crítica se ha convertido en una cruzada para las instituciones que cohabitan en Andalucía. Cada vez el escenario en que vivimos se parece más a la Europa de entre guerras donde la libertad de expresión se castigaba con la cárcel, y donde la palabra era perseguida y encerrada en campos de concentración llamados poéticamente de “reeducación”. Vuelve la censura y vuelve la maquinaria de represión que estaba intacta desde los Pactos de la Moncloa. La Ley Mordaza no es más que un paso más en la cercenación de nuestra libertad como pueblo.
 
Nada cambia desde la llegada de la democracia a España. La transición se está convirtiendo en una gigantesca mentira histórica. La autonomía se va pareciendo cada vez más a la creación de un estado dentro de otro estado, con una especie de monarquía parlamentaria dirigida desde San Telmo. Y el pueblo que permanezca impasible, obediente y atento a los martes de Consejo de Gobierno. Estamos volviendo a pasos agigantados a lo que definió Bakunín hace un siglo: Donde comienza el Estado termina la libertad del individuo, y viceversa. Este concepto de Estado es el que usa hoy toda la maquinaria legal para perseguir la libertad de expresión y de pensamiento.

En Andalucía llevamos desde los años 80 olvidándonos, convenientemente, de lo que pasó en Europa tan solo 40 años antes. Un telón de acero ha caído sobre la memoria colectiva. Más aún cuando la llamada Memoria Histórica se ha puesto en entredicho en el propio parlamento andaluz estos días. Quieren anestesiarnos para que nadie recuerde la persecución de la libertad y de la expresión en libertad. Quieren pasar página del sufrimiento de millones de personas en Andalucía durante 40 años. Quieren blanquear la historia, en el mayor ejercicio de cinismo político desde los negacionistas europeos sobre los crímenes nazis.

En esta región del sur ha vuelto el miedo a hablar en libertad, a criticar la gestión política. Los políticos son intocables hoy para todos los estamentos, ya no hay separación de poderes, y los derechos de los ciudadanos están ahora, más que nunca, heridos de muerte. Antes teníamos la esperanza de que había una Justicia que nos acogía a todos. Y de ese engaño nos han despertado con un atronador cañonazo de realidad. La tutela de estas libertades se había convertido en un fiel indicador de la solidez de nuestro sistema democrático, en el que la crítica y la expresión de la disidencia garantizaban la legitimidad política del sistema. Eso hoy está completamente en entredicho desde que se persigue sin tregua la crítica a la gestión política, avalada, además recientemente, por la doctrina del TSJA donde el político puede denunciar a la prensa y a los ciudadanos que critiquen su gestión, y encima le pagamos el abogado entre todos.

La mentira se apodera ahora de todas las instituciones y las secuestra, la deja sin voz y sin representados. Es la institución del pueblo sin el pueblo. De los partidos y de sus funcionarios. Los intereses de la mayoría desparecen por los desagües del estado mientras nadie hace nada. Mientras todos callan. Muy pocos son hoy quienes hablan para ser la voz de los que sufren en silencio toda la ignominia del régimen, la voz de los desclasados que nunca aparecerán en los BOE o en los BOJA. Y, aun así, siguen levantando la voz contra el sistema, aunque sepan que se arriesgan a la denuncia pública, a la persecución política y al castigo del sistema. Nuestra libertad de expresión es la que está hoy en juego, y mientras más callemos más peligramos como pueblo.

Todos los regímenes hablan siempre de que buscan lo mejor para su pueblo, y cuando se van asentando en el poder siempre buscan todos los elementos a su alcance para perpetuarse en el poder, sea como sea, y al precio que sea. Pero también buscan a los que critican para señalarlos como enemigos del pueblo, con el objetivo de aplastarlos a todos. Ese concepto de enemigo del pueblo les abre las puertas a cometer todos los desmanes posibles contra los ciudadanos indefensos. También a los regímenes les gusta prohibir con el objetivo de controlar a toda la sociedad. Solo ellos dicen lo que es lícito y lo que es ilícito. Y lo más penoso es que sus postulados son refrendados por los tribunales, como un ejercicio de democracia y de libertad.

Los parlamentos les dan la espalda a sus propios pueblos. El caso del andaluz es aun más dramático. Nadie sabe para qué sirve ni para que está ahí. Tan solo que cada cuatro años nos han convertido a todos en ganado electoral para que vayamos a las urnas y mantengamos el estatus quo de sus señorías y de sus partidos. El Parlamento andaluz se está convirtiendo cada año que pasa en una entelequia absurda e inservible. Durante años no hubo una sola comisión de investigación, durante años no hubo un efectivo control al gobierno regional. Las preguntas nacían en las bancadas y morían en el Boletín Parlamentario. Algo inerte se había creado para los andaluces, mientras que sus componentes se hacían con el rango de Autoridad y se llenaban de privilegios.

El servicio público está profundamente muerto. Los gestores se han convertido en virreyes y en auténticos sátrapas provinciales, incapaces de rendir cuentas ante nada ni ante nadie. La descentralización ha creado inmensos reinos de taifas por las consejerías, aumentados exponencialmente por las empresas públicas que manejan. El monstruo creado es tan grande que es imposible controlarlo. Además de convertirse en una gigantesca máquina de devorar presupuestos y dinero público, alimentado profusamente por las subvenciones europeas. Si Europa despertara y analizara para qué sirve la máquina administrativa regional estaríamos ante la mayor causa general realizada en Europa desde la caída del III Reich.

Y el actual gobierno regional es para echarse a llorar. Si el Susanato era lo peor que sufrió Andalucía desde la invasión vándala, el nuevo gobierno lo está haciendo bueno. No está tocando ni uno solo de los enquistados problemas que tiene la Junta de Andalucía desde la época de Escuredo y de Borbolla. El cambio que vendieron es el mayor tocomocho jamás realizado a un pueblo a través de las urnas. El Susanato cayó, pero su régimen sigue intacto. La alta jerarquía de los funcionarios PLD y los cuadros intermedios siguen intacta y en la misma inercia del gobierno anterior. Nada cambia. Como dijo Talleyrand “lo que no puede ser, no puede ser, y, además, es imposible”.

La persecución de Candel alcanza ya límites que sobrepasan todas las escalas posibles. De todo lo que ha expuesto en sus años de lucha no se ha investigado nada. Sus denuncias sobre la mala gestión sanitaria quedan solo en los ecos de la red. Nadie ha abierto una sola investigación para averiguar si lo que estaba denunciando era cierto. Ni la administración ni los tribunales. Ni un solo fiscal ha abierto una sola causa por sus denuncias públicas. Cuando un sistema democrático persigue la libertad de expresión en toda su extensión y con todos los medios posibles a su alcance sin investigar las denuncias de los hechos, estamos totalmente indefensos los ciudadanos. Eso es lo que empieza a estar en juego en esta Andalucía.

Además, quien denuncia la corrupción en Andalucía tiene ya un futuro extremadamente incierto. La enorme lista de damnificados y perseguidos por denunciar la corrupción es cada vez más larga. Se ponen en juego con estas actuaciones nuestra democracia y nuestro estado de derecho, porque no hay nada más lejano de la democracia y de la libertad que usar las instituciones para acallar la denuncia y para acallar las voces que se levantan contra la corrupción. A Candel el estamento político lo consideró, desde el primer minuto, como el enemigo del pueblo que deber ser silenciado, castigado y derrotado. Idearon entonces la campaña en la que Jesús insultaba, ya no importaba lo que Jesús denunciaba, ni importaba la carga de sus mensajes ni la profundidad de sus denuncias.

Una campaña que terminaron judicializando intentando meterlo en un laberinto judicial donde pierda sus fuerzas y energías en defenderse, con la pretensión de que haya antes un juicio social de condena antes que ejercer su derecho a la defensa. Así le han abierto tres frentes: Por un lado, expedientes en el hospital, en el Colegio de Médicos y en los juzgados de lo penal por parte de la fiscalía por supuestos delitos de injurias y calumnias a Susana Díaz, a Martín Blanco y al fiscal jefe de Granada. Una tripleta que pretende meterlo en una jaula judicial para que todos tomemos ejemplo de que quién denuncia la corrupción en Andalucía lo va a tener muy difícil como ciudadano.

Para muchos de nosotros los derechos a la libertad de opinión, de expresión y de información son derechos que consagran nuestra Constitución. El ejercicio de la crítica y la libertad de expresión contra el sistema deben estar garantizados por el propio sistema, en caso contrario, cuando el sistema pone coto a la crítica ejercida en libertad, como es el caso de Candel, se pone en peligro nuestra democracia y nuestra Constitución. Cuando estos derechos dejan de estar tutelados y protegidos por los poderes públicos el propio sistema deja de tener legitimidad.

Candel hace un ejercicio de activismo político cuando denuncia las carencias del sistema sanitario y señala a los responsables. Y aunque lo haga con palabras políticamente incorrectas o malsonantes, esto es un énfasis para denunciar los hechos, son opiniones sobre la gestión de los responsables sanitarios que no dejan de ser otra cosa que políticos dirigiendo una institución, y esta crítica no debe ni puede tener límites, porque cuando se dirige a ellos no se dirige a la persona, sino al gestor y a la crítica de su gestión. El lenguaje usado por Candel no debe nunca quedar fuera del campo legítimo de la libertad de expresión. Pero a Candel, sin embargo, lo enjuician por los hechos a personas, obviando al político y al gestor, desnaturalizando así todo el contexto de la crítica a la gestión. Lo que en sí es un gravísimo error de interpretación de los hechos y pone barreras claras e infranqueables a la libertad de expresión.

Todas las críticas de Candel se realizan en un momento en el que el poder político ha adoptado medidas que afectan a un problema de gran calado social como era la defensa de la sanidad pública y su deterioro tras el problema generado por la fusión hospitalaria, que ha quedado demostrada que fue nefasto para la ciudad de Granada, aumentando exponencialmente las listas de espera y deteriorando gravemente la atención sanitaria de los ciudadanos. Nadie hasta la fecha ha propiciado un mapa de riesgo por esto, ni ha hecho un estudio epidemiológico sobre los impactos de estas medidas en la población. Los responsables de todo esto, sin embargo, se han ido de rositas.

Otro hecho de obligada concurrencia en este caso es que sus denuncias han sido siempre públicas y en redes sociales, con total ausencia de cualquier tipo de violencia y de llamamiento a la misma. A pesar de que el inicio de todo este proceso judicial fue una denuncia de dos particulares por delitos de odio. Y precisamente el archivo de este delito fue la excusa perfecta para apartar esta acusación de delito de odio e iniciar un proceso en defensa de los cargos públicos a los que denunciaba. Y todo ello a pesar de que uno de ellos había dejado de ser autoridad y cargo desde hacía más de un año.

Lo que los tribunales pretenden juzgar de Candel no son sus denuncias, ni su contenido – estas no les interesan en absoluto -, sino cómo las hace y cómo las dice. Candel no perseguía con sus denuncias provocar odio – como fue el objeto de la denuncia – ni atacar el derecho al honor ni de Susana Díaz ni de Martín Blanco, simplemente perseguía llamar la atención pública y política de la ciudadanía para informar del peligro de la fusión hospitalaria, y de los riesgos que corrían todas las personas y sus familias a través de sus denuncias públicas, para que, además, los ciudadanos no permanecieran en silencio y quietos, como pretendían los entonces gestores sanitarios, sino que reivindicaran sus derechos, y que se comprometieran a exigirlos, como así ocurrió en las manifestaciones que convocó en la ciudad de Granada y a las que acudieron decenas de miles de personas. Por esto es, precisamente, por lo que se juzga a Candel.




14 comentarios:

  1. Felicidades Antonio Barreda!!
    Por una vez, alguien habla claro de lo que pasa en Andalucia.
    El pobre Dr. Jesús Candel, que alzó la voz para denunciar y a la vez intentar que la ciudadania despertaramos, tanto en la Comunidad como los que lo seguimos, fuera de ella PAGARÁ LAS CONSECUENCIAS y eso, ninguno de nosotros deberiamos consentirlo.
    Andalucia debe salir a la calle y demostrar a todos estos sinvergüenzas, los pasados y los presentes... quien tiene el poder.
    NO SE PUEDE ESPERAR NADA DE NINGUNO DE ELLOS!!, sólo están ahi para enriquecerse, asi que se tapan unos a otros.

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  2. Antonio Barreda he seguido a Jesus Candel como uno mas de media Andalucia.. Todos los que apoyamos las sanidad publica gratuita de calidad y contra la corrupción de los enchufados, politicos ,asesores y todo tipo de chupoteros de lo publico(dinero de todos los que hemos contribuido atravez de impuestos) Presuntamente .Estamos muy angustiados porque , aunque era logico , que despues de cuarenta años gobernados por el psoe pasara ala oposición , el efecto de Jesus hizo efecto , positivo en un primer plano y un efecto , que como votante de izquierdas (obrero del campo , trabajador de la hosteleria y obrero de la construcción...Trabajos que me han permitido vivir , sin dinero , pero con dignidad...Y en el segundo plano ha dejado abiertas las puertas a unas derechas , que pensabamos que iban han influir en temas de lo publico como son las tres derechas(PP,Cs, VOX)..Lo que como ves se ha cumplido a rajatabla.. las empresas ven un yogur en estos temas ya que la sanidad mueve mucho dinero... Yo vote a izquierdas , porque tengo unos años y se como van las derechas , piden la abstención en las tabernas donde alternaba, yluego los numeros en los votos no cuadraban, dado que los de derechas al saberse perdedora , en numero ultilizan tacticas , como el desanimo, como se vió en las elecciones de nuestra comunidad (Andalucia)dejando entrada a las politicas de privatizarlo todo , de modo que el que se ponga enfermo y no tenga dinero , se muera despues de haber contribuido en mi caso a que tengamos productos naturales en nuestra mesa. Dicho esto, siento un desaliento total , porque se que Jesus Candel pidiendo una cosa ha conseguido otra..Porque el poder si la justicia no está separada, se vuelve inrrompible y podrida hasta el tuétano..Conclusión he pensado , que el efecto de insultos , con la libertad de expresión por delante no ha servido solo para dejarnos un mensaje , como salga otro Jesus Candel , les espera lo peor..Dejandonos en las manos de otro moustro peor aun como la ultra derecha , que mis padres y yo en el tardo-franquismo , me toco vivir , teniendo que desplazarme a Antequera , por cualquier consulta , como , parece que va a volver a ocurrir, dejando a viejos de los pueblos que se vacian de gente en las cunetas..(sin protección medica)... Repito, ya que tu tienes contacto con Jesus Candel , podrias decirle , que el no ir a votar es la peor elección de su extrategia, por lo que dije antes (ellos votan todos)Y que siga luchando por la sanidad Andaluza ya que creo que es un referente a nivel regional y nacional , contra la corrupción en este tema de la salud... Atentamente, un enfermo coronario cronico.

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    1. Antonio, que bien explicado. Y pensar que aún hay muchas personas que no lo entienden,....que cegados están!!! Muchas gracias

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    2. Fran falló no ir a votar
      Aunque no existe el partido perfecto para cada una de nuestras vidas si existen los partidos totalmente nocivos para tod@s .....y a esos les votan
      Lástima de los seguidores del dr. Que también le hicieron casona esto y gran irresponsabilidad del de. sabiendo la gente que le sigue......al menos que quisiera lo que ha salido y este contentísimo salvo que todavia quedan cargos del susanazgo y le irrite sobremanera hasta que desaparezcan

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  3. Acabo de leer su articulo sobre el señor Candel, me parece interesantísimo, y sobre todo esclarecedor, claro que muy pocos lo leerán completo, somos más dados a leer poco, y a opinar mucho y muy variopinto. Le animo a que con su pluma continúe apoyando a esta persona y al personaje que se ha convertido. y que con sus artículos continúe haciendo labor pedagógica, que algo quedará, y a otros compañeros suyos de profesión les pido lo mismo, nosotros el pueblo raso que apenas sabemos escribir y aún así cometemos numerosas faltas ortográficas (si no fuese por el corrector) no tenemos la capacidad de expresar claramente lo que en verdad queremos decir, por eso este movimiento necesita a gente como usted, complementaria del señor Candel. Unsaludo.

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  4. Escriben muy bien su compañero y usted. "Sic semper tyrannis". Mucho político vividor, ávido de poder y lerdo.Extensible al sistema. Yo les /le
    aplicaba el Caton.Mucha suerte Jesús eres como Nadal, no tienes que demostrar nada más. Gracias

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  5. Estos artículos deberían tener más difusión y más comentarios, en fin... Buen día

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  6. Mas claro no se puede decir, magnifico articulo. Enhorabuena Antonio.

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  7. el grado de corrupcion de la clase política es directamente proporcional a la miopía de la gente, que no es capaz de ver como auténticos ladrones campan a sus anchas a lo largo y ancho de nuestro país , lo peor es el conformismo que conlleva a la inacción, mientras todo se va desmoronando poco a poco como si fuese producto de la erosion, hemos perdido la empatía colectiva y con ella nuestra libertad como pueblo , la receta es efectiva y funciona y sus inventores conscientes de ello, divide y vencerás y así es como estamos, unos votan blanco otros votan negro y los últimos ni siquiera votan porque ya han perdido cualquier atisbo de esperanza,hace tiempo que saben que ya es tarde y que de nada sirve intentarlo y es justo eso lo peor que nos pueden arrebatar, mientras tanto que sueñe el que pueda.

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  8. todo mi apoyo a jesús candel, la clase política que ha habido y hay, no me representa, en un alarde de miseria sin duda alguna, no merecen ni tan siquiera un insulto.

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  9. Solo agradecerle el haber escrito el artículo sin medias tintas y muy clarito , esto nos tiene que haber los ojos de lo que tenemos y de lo que se nos viene encima, nos lo van metiendo poquito a poco y aunque nos demos cuenta nos lo tragamos.
    Todo mi apoyo a Dr. Candel y a la asociación Justicia por la Sanidad de la cual soy socia .
    Muchas gracias por abrirnos los ojos

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  10. ALLÍ ESTAREMOS EN LA PUERTA DE LOS JUZGADOS, EL PODER JUDICIAL DEL TSJA, HACE LO CONTRARIO DE LO QUE PREDICA, POR UN LADO PERSIGUE AL DR. D. JESÚS CANDELL FÁBREGAS, CUYA BANDERA ES LA HUMANIDAD, EL ALTRUISMO, LA EXCELENCIA, Y LA RESPONSABILIDAD.

    Y POR OTRO, EL TSJA, PROCEDE COMO EN LOS TIEMPOS ANTIGUOS, COMO LA NOTICIA, NO ES BUENA PARA LOS POLÍTICOS CORRUPTOS Y CRIMINALES, PROCEDEN A MATAR AL MENSAJERO, O SEA AL DR. CANDELL FÁBREGAS.

    QUE HEDOR, QUE EFLUVIOS, QUE FETIDEZ, DEBEMOS SOPORTAT EL SUFRIDO PUEBLO ANDALUZ DE POLÍTICOS CORRUPTOS Y CRIMINALES, EN LA QUE SU ÚNICO MÉRITO CONOCIDO, ES QUE TOCAN MUY BIEN LA FLAUTA, CON UN AGUJERO SÓLO, DESDE LA JUVENTUDES SOCIALISTAS, YA QUE TODOS LOS CARGOS LOS HAN OBTENIDO,
    BENEFICIADOS POR LA LIBRE DESIGNACIÓN, ENFANGADOS POR EL NEPOTISMO, 0BTENIDOS POR LA DISCRECIONALIDAD Y UNILATERALIDAD, HACIÉNDO OPACIDAD TOTAL QUE IMPIDE CONTROLAR LOS REQUISITOS EXIGIDOS, Y MEDIANTE LISTAS CERRADAS Y SECRETAS.

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  11. IMPRESIONANTE Y FEHACIENTE, PERO ESTOS CANALLAS SABEN QUE NO PODRAN ENCARCELARLO TAN FACIL PORQUE ENTONCES SI QUE ESPAÑA SE LES HECHARA A LA YUGULAR , LA FE MUEVE MONTAÑAS Y JESUS CANDEL ES LA "FE" EN PERSONA .

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