martes, 28 de abril de 2015

Cornucopia



Corría el año 70, un año antes de mi desafortunada muerte, cuando el pueblo de Sicilia solicitó la ayuda de Cicerón contra el pretor Verres, hombre de hábil palabra, imaginativo, altanero y arrogante. Sólo dos pinceladas a tener en cuenta:

1º. Verres gobernó Asia con Dolabela, robando lo indecible. En el juicio por malversación, Verres le echó la culpa a Dolabela y él salió libre.

2º. Volvió a Roma para gobernar Sicilia con las mismas prácticas y robó todo lo que pudo pillar: obras

de arte de templos y particulares, erario público, esclavos, etc. Llevó a la región a una situación misérrima con políticas fiscales altísimas, practicó el clientelismo, la extorsión y el soborno.

El presidente del tribunal era Glabión, hombre de honor y buscador de justicia, y el defensor, uno de los mejores abogados de la época, Hortensio, que intentó por todos los medios quitarse del juicio a Glabión, sin éxito.


Los discursos que pronunció Cicerón en el juicio se llaman las Verrinas o In C. Verrem en los que desveló las argucias y los robos cometidos por el pretor, ante lo cual, su abogado calló y, posteriormente, Verres se exilió, motu proprio, el muy verraco -juego de palabras con el que jugaba Cicerón-.

Dicho lo cual, ante lo que estamos viviendo en el Parlamento, en los altos tribunales y a los que vamos nosotros, el pueblo, yo no me quedaría sólo con las Verrinas, sino que me lanzaría con unas buenas filípicas y catilinarias para decir las verdades del barquero y poner a cada uno en su sitio. La poca vergüenza imperante y emergente lo requiere.


No es lo que sabemos, es lo que no sabemos

Inquietante, cuanto menos, es lo que no sabemos. Ante tanta corrupción y tantísimos imputados, no solo estoy preocupada por la situación política de lo que ha pasado en la mesa del Parlamento sino de la poca altura que manifiestan las nuevas fuerzas políticas andaluzas.


De Susánida no me extraña nada: protege, encumbra, relativiza y no expulsa del partido a ninguno de los irresponsables, ni los piensa echar. Ella en plan numantino absoluto.


Oído queda Disléxico. Sus declaraciones han sido de un deshonor, de una desproporcionada ignominia sin límites, una falta de respeto al pueblo andaluz. Además de que, el día antes, Alaya lo acusara de que el sistema de los ERE era extensivo a todas las consejerías.


Apunta que lo que decidía en "sus" Consejos de Gobierno era legal. Bueno, eso lo decidirá el Tribunal Supremo, el TSJA y Alaya con los informes de los expertos, no Vd. Y si todo era tan legal, legalísimo, ¿por qué salieron Vd., Griñán, Moreno, Zarrías, Viera aforados como senadores y diputados? Por no hablar de los imputados menores que estaban en la Diputación permanente, declarando ante el TSJA ¿O es que tenían algo que temer?

Dice Resines II que en la Junta de Andalucía «ni se ha conocido ni se ha mantenido ni se ha impulsado ninguna ilegalidad». Miente: ¿cómo que no se ha conocido? Entonces, ¿por qué se decidió cambiar el sistema de pagos? ¿Por arte de magia?

Si hubo fraude grande o pequeño, lo dirán los jueces. O sea, que haberlo, haylo, pero con cientos de cientos de millones, el tipo se permite el lujo de hablar de "pequeño". ¡Pero si la juez ha dicho 855 y en los Cursos de Formación dice la Policía más de 3.000 millones! Este señor se ríe de todo el pueblo andaluz en nuestra cara.


Cornucopia

Después de estar 19 años de rey absoluto del Cortijo La Juntilla, colocando a su familia en numerosos puestos de la Junta y a su hijo de "conseguidor", repartiendo nuestro dinero para acallar las revueltas y pagando la paz social, nunca jamás, nunca, nadie le dijo que era ilegal lo que se estaba haciendo: desviar nuestro dinero de la Intervención para hacerlo salir de la Junta a través de la Agencia IDEA o Faffe u otras agencias... ¿Nadie? ¿Nunca? ¿Jamás? Pues a tres de sus consejeros se les enviaron los informes, según Manuel Gómez.

¿Y los 10 millones para la empresa de tu hija? Porque la subvención fue ilegal y deben devolverla ahora, ¿tampoco nadie se lo ha dicho?

A reglón seguido, suelta por esa boca la siguiente mentira: las decisiones de su Gobierno siempre fueron legales y estuvieron basadas en informes que así lo avalaban. ¿Y los 15 informes de la Intervención que te decían que no eran legales? Ah, que no los recibiste, ya, ya.

Para colmo del cinismo ha añadido: si hubo alguna persona que "utilizó fraudulentamente los fondos", serán los jueces, la Justicia la que determine si "las actuaciones individuales de esas personas causaron o provocaron fraude o no", abundando en los cuatro golfos.

Cui prodest scelus, is fecit

¿A quién benefició el reparto de los cientos de millones de los ERE y los miles y miles de los cursos de formación y demás casos? A las cientos de empresas Administración paralela, a los cercanos al partido, a los empresarios, a sindicatos, a particulares y a los que los repartieron para perpetuarse en el poder, como ha sucedido: comprando votos. ¿Quién lo permitió? El partido actual en el Gobierno en funciones, el PSOE andaluz. De Zarrías y Vallejo, ¿para qué hablar? Han sido un puro eco de su amo. Por cierto, hay cuatro aforados menos desde el 16 de abril.




http://www.eldemocrataliberal.com/search/label/Cornelia%20Cinna

1 comentario:

  1. Ave Cornelia, voy a compartir esto por todas partes. Además, un texto digno de enmarcar. Seguimos a por ellos.

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