sábado, 5 de septiembre de 2015

Progre es...

Artículo de Rafa González


Progre es el que mira esta foto y se mete en Twitter a toda prisa para crear un hashtag. El que mete presión a sus followers de que lo hagan trending topic antes de las 20:00, que luego ha quedado para el gin tonic (qué pasa, que por ser de izquierdas no me puedo tomar un gin tonic?, pregunta el progre, defendiéndose).

Progre es el que cuelga esta foto en las redes sociales con una crítica vacía, etérea, abstracta y no específica a conceptos mucho más vaporosos, como el capitalismo, la derecha y la codicia (el gin tonic cae del cielo, no necesita ni fabricación, ni transporte ni venta). 

Progre es, incluso, el o la imbécil que se atreve a meter más basura aún al asunto, tipo ''esta es la consecuencia de lo que votáis'' (lo que votáis es la derecha, claro), sin pararse a pensar siquiera que en Siria hay una dictadura, apoyada por cierto por el 'antifascista' Vladimir Putin.

Progre es también el que retuitea, sin comentar, pero ayudando a hacer grande una bola gigante de conceptos e ideas sin matizar, sin explicar.

Progre es el que te pide a ti que abras tu casa mientras él cierra la suya.

Progre es el que exige a los demás países que sean solidarios y equitativos con el reparto de refugiados (el socialdemócrata Martin Schulz) a sabiendas de que su país (Alemania) es el más rico y el que, de acuerdo al ideal socialdemócrata, más esfuerzo debería hacer. Pero que no tiene huevos de decírselo a su electorado.

Progre y, además, miserable, es el que no hace pausa ninguna en su penosa vida para hacer campaña electoral con una imagen así.


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